martes, 21 de agosto de 2018

Jodida.

No hay nada más doloroso que ver los pedazos de tu alma caer.
Verte destruida en el reflejo,
verte
desconocida
en el espejo.

Ser títeres de otros y ser la muñeca consentida de nadie.

Tener miedo de tus palabras
y de las consecuencias
cuando debes de tener más miedo por guardarlas.

Me siento hipócrita y me siento defraudada.
No me di cuenta de lo valiosa que soy
hasta que me he convertido en polvo.
Me siento más empoderada que nunca
y a la vez lo más reprimida que he estado jamás.

Me he liberado de mis temores internos
ahora tengo temores externos que no me dejan volar.
Antes estaba ciega
mi mente estaba nublada de mis propias mentidas e insultos.

Ahora estoy atada de manos y pies.

No sé qué hacer.